Un entrenador personal puede ser capaz de poner en forma nuestro cuerpo, y un psicólogo puede ayudarnos a resolver nuestros problemas de imagen corporal. Pero si lo que realmente te cuesta es mantenerte motivado para hacer ejercicio, aquí tienes unos consejos que quizá puedan ayudarte.

 

¿Cómo mantenerte motivado para hacer ejercicio?

Aprovecha el poder del pensamiento positivoUna gran parte del éxito se encuentra simplemente en aparecer. Sin embargo, algunos días, tan solo atarse las zapatillas puede sentirse como una tarea. Los psicólogos deportivos entienden esto, por lo que hemos pedido a algunos de ellos que nos revelaran sus mejores consejos para seguir con un régimen de ejercicio a pesar de sentirnos cansados o presionados por el tiempo.

 

Muévelo al principio de tu lista de cosas por hacer

Haz siempre el ejercicio a primera hora de la mañana para que nada más en tu día interfiera con tu capacidad de hacer ejercicio. ¿No eres una persona madrugadora? Hazlo más fácil para ti reuniendo todo lo que necesites la noche anterior.

 

No lo hagas solo

¡Recuerda que a veces no se trata sólo de ti! También puedes pensar en la necesidad de tu perro de actividad física, y eso puede ayudarte a cumplir con tu horario de funcionamiento. ¿No tienes perro? Encuentra un compañero de gimnasio o un compañero de carrera; es menos probable que no vayas si alguien te está esperando.

 

Programa tu horario

Si lo que deseas es mantenerte motivado para hacer ejercicio, con compañero o no, trata el ejercicio como cualquier otra cita. Tenerlo ya bloqueado en tu calendario lo hará parecer menos opcional.

 

¿No te gusta algo? No lo hagas

Sólo porque todos estén obsesionados con el spinning o el CrossFit no significa que sea para ti, y eso está bien. En lugar de eso, encuentra algo que realmente disfrutes. Es más probable que permanezcas activo cuando haces algo por tu propia voluntad, en lugar de que algo o alguien más influya o dicte tu decisión.

Muévelo al principio de tu lista de cosas por hacer

Aprovecha el poder del pensamiento positivo

Si estás intentando mantenerte activo y motivado para hacer ejercicio, seguramente te hayas estado diciendo que deberías hacer deporte. Puede parecer una tontería, pero el simple hecho de decirte a ti mismo que quieres hacer ejercicio puede marcar una gran diferencia. Si la idea de la actividad en sí no te pone lo suficientemente en forma, intenta concentrarte en un aspecto de la misma (ya sea la música que pone el instructor o los amigos con los que podrás conversar después de la clase).

 

Acepta que no siempre será perfectoPrograma tu horario

Afrontémoslo: Algunos días es difícil reunir la energía para darlo todo. Si no consigues estar motivado para hacer ejercicio puedes no hacer nada o reconocer que no te sientes bien y aun así intentar hacer algo, ya sea pedalear lentamente en la última fila de la clase de spinning o dar un paseo en lugar de quedarte frente al televisor.

 

Déjalo ya

¿No tienes tiempo para tomar una clase o para hacer una carrera larga? Las investigaciones demuestran que se obtienen los mismos beneficios para la salud si se realiza actividad física durante tres segmentos de 10 minutos que si se hace a partir de 30 minutos de una sola vez. Haz tres caminatas rápidas de 10 minutos durante el día, o intenta hacer una sesión de 20 minutos por la mañana y 10 minutos de trabajo de fuerza por la tarde. Cada pequeño detalle cuenta. En lugar de decir: “No tengo 30 minutos así que no me voy a molestar”, trata de ver que 10 o 15 minutos son mejor que nada.

 

Aclara tus prioridades

Mantenerte motivado para hacer ejercicio¿Por qué quieres hacer ejercicio? La respuesta nunca debería ser «porque se supone que debo hacerlo» o «porque es lo correcto». Tienes que querer y saber realmente por qué quieres, cuanto más claro y personal sea tu objetivo, mejor. También podemos ir un paso más allá y literalmente llevar el lápiz al papel: Escribir por qué estamos haciendo ejercicio y qué esperamos lograr, ya sea que lo hagamos para lograr más energía o simplemente para obtener un menor riesgo de enfermedades cardíacas, puede ayudarnos a mantenerte motivado para hacer ejercicio.

 

Concéntrate en el objetivo

Claro que puedes sentirte medio muerto cuando tu alarma suena para hacer ejercicio temprano por la mañana, pero recuerda lo bien que te sentirás después y con cuanta energía. Y si estás a mitad de la sesión de ejercicios y estás considerando dejar de hacerlo, piensa que cada paso te acerca más a tu objetivo y que el malestar leve es solo una señal de que tu cuerpo se está fortaleciendo y acelerando.