Un estudio del Centro para el Control y la Prevención (CDC) demostró que padecer sobrepeso está fuertemente relacionado con una falta de amplitud en el movimiento de las articulaciones. Sin embargo, no se trata simplemente de realizar deporte para evitar el sobrepeso, sino que el acondicionamiento físico también se encargará de fortalecer el sistema musculoesquelético en su totalidad y de que las articulaciones se encuentren más estables.
Por otro lado, son tantos los beneficios del acondicionamiento físico que estamos hablando de un acondicionamiento del organismo casi en su totalidad. Pero además la mejora se produce de manera muy notoria e integral un tiempo después de comenzar con la actividad física. A medida que el cuerpo se acostumbra al ejercicio y va aumentando su intensidad junto con la frecuencia, el deporte comienza a formar parte de la vida de la persona y los beneficios a largo plazo son exponenciales.
Todos los sistemas del organismo aumentan su eficacia. Y, en el caso de los atletas y deportistas que realizan trabajos de forma habitual consiguen un equilibrio en el funcionamiento de todos los sistemas del cuerpo para lograr los mejores resultados. Evitando, así, cualquier tipo de lesión.
Dentro de la enorme cantidad de beneficios que presenta el acondicionamiento físico, los más importantes son el acondicionamiento del corazón, de los músculos y los pulmones. Puedes tener más información tanto a estos como de otros, en el siguiente artículo: Los beneficios del acondicionamiento físico.
Acondicionamiento físico para evitar lesiones
Dos de las patologías más comunes por la falta de acondicionamiento físico son la tendinitis y la bursitis. Ambas son muy comunes y se desarrollan cuando el cuerpo no está preparado para lo que resulta un exceso de movimientos repetitivos y que están mal ejecutados durante la actividad física. Además, esa falta de acondicionamiento genera lesiones por exceso de peso en las cargas o en el tiempo de trabajo. Y pueden aparecer desde simples fatigas musculares hasta desgarros.
La alimentación debe ir de la mano del acondicionamiento físico. Ya que es la fuente de energía y nutrientes que el cuerpo necesita para luego quemar durante el ejercicio. Las vitaminas, las proteínas y la hidratación son necesarios para la reparación de tejidos y la renovación celular. Por lo que resultan esenciales en los procesos metabólicos de la actividad física.
El acondicionamiento físico y la mente
La mejor frase con respecto al deporte y la salud mental habla de que el esfuerzo ayuda a la mente y la mente ayuda al esfuerzo. Esto se debe a que mantener una mente fuerte ayudará a que la persona pueda esforzarse al máximo potencial. Pero además a ser constantes en el entrenamiento y no abandonarlo a las pocas sesiones. Este esfuerzo es sinónimo de progreso y este progreso se encargará de ayudar a la mente y su fortaleza.
El simple hecho de ver progresos en el rendimiento físico supone una motivación muy especial para mantener una constancia y una dedicación a la hora de entrenar. Pero además es una espectacular forma de aumentar la autoestima de quien intenta superarse día a día y observa esos avances. Lo mejor es que todos estos aspectos, como motivación, fortaleza mental, rendimiento físico y una mente fuerte se irán retroalimentando de manera casi natural por el camino.
Pero esa mente sana no solo hace referencia a la motivación, sino que el estado de salud mental, la energía positiva y el estado de ánimo general también mejoran de manera significativa por el solo hecho de realizar deporte.
Y es que el deporte es una vía de escape muy importante para muchísima gente. Con él logran escapar durante un tiempo de la rutina diaria y desconectar de todo el estrés acumulado. Sencillamente con el deporte se dejan de lado los problemas del pasado y los que vendrán, para poder centrarse en el presente. Y por ahí pasa una de las claves, ya que está comprobado por muchos estudios que enfocar la mente en el presente es una de las claves para ser más feliz.
Conclusión
Por último, enfocando la mente en el deporte se logran evitar (o salir de) depresiones y problemas de ansiedad. Por lo que cada vez es un método más empleado por los especialistas para alejar este tipo de patologías y lograr una vida plena. Uno de los motivos es que, al realizar ejercicio, el cuerpo libera endorfinas, la famosa hormona de la felicidad. Y un cuerpo entrenado conduce a una persona que sencillamente es más feliz.
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